¿Eres más de dulce o de salado? Si tu respuesta ha sido dulce, esta publicación es para ti. Aquí vas a poder conocer los dulces andaluces navideños más típicos de Andalucía.
DULCES ANDALUCES NAVIDEÑOS GENERALES
PESTIÑOS: un clásico que nunca pasa de moda
Los pestiños son el dulce que nunca falta en una mesa andaluza. Se usa, sobre todo, en fiestas religiosas, como Semana Santa, el Día de Todos los Santos o la Navidad. Harina, aceite, anís, ajonjolí y miel: ingredientes simples pero con un sabor que te hace cerrar los ojos al primer bocado. Se fríen, y se bañan en miel o azúcar. Si los pruebas recién hechos, todavía calentitos, es como si la abuela te estuviera dando un abrazo en forma de dulce.

BORRACHUELOS: pestiños con relleno
Los borrachuelos son otro dulce andaluz navideño que no puede faltar en las casas andaluzas por estas fechas. Son como los pestiños, pero rellenos de cabello de ángel y luego se fríen en aceite de oliva.
DULCES ANDALUCES NAVIDEÑOS DE CÓRDOBA
TURROLATE: el turrón cordobés con alma de chocolate
Si nunca has probado el turrolate, ya te estás buscando una excusa para darte una vuelta por la provincia de Córdoba. Como su propio nombre indica es un turrón (almendras) pero con chocolate y tiene sus raíces en los pueblos cordobeses. Es compacto, contundente y perfecto para calificarlo como un auténtico dulce andaluz navideño.
DULCES MALAGUEÑOS NAVIDEÑOS
MANTECADOS Y POLVORONES: joyas de Antequera y Estepa
Aunque los mantecados y polvorones se han extendido en toda España como los reyes de la Navidad, su origen está en Andalucía. Hoy en día, en particular, en Antequera tienen una maestría especial para hacerlos, al igual que en Estepa, que ya es la capital oficiosa de estos dulces. El truco para disfrutar de un buen mantecado es no apretarlo mucho antes de morderlo. Si lo haces mal, prepárate para una nube de polvo directo a la ropa negra que te habías puesto para la cena.
ROSCOS DE VINO: Málaga sabe a Navidad
Los roscos de vino de Málaga son un imprescindible en la Navidad malagueña, con raíces árabes que nos transportan a la época de Al-Ándalus, cuando la gastronomía se llenó de miel, canela y frutos secos. Con su toque único de vino dulce malagueño, especialmente de la Axarquía, estos dulces conquistan por su textura esponjosa, su sabor inconfundible y su cobertura de azúcar glas. ¿El secreto? Una receta que apenas ha cambiado desde nuestras bisabuelas y que sigue sabiendo a tradición y origen andaluz.

DULCES GADITANOS NAVIDEÑOS
ALFAJOR: la estrella árabe de Medina Sidonia
Si hablamos de otros dulces con historia, traemos al alfajor, ¡y no es el argentino! Este manjar, típico de Medina Sidonia, lleva siglos haciéndonos felices con su sabor a miel, especias y frutos secos. Es un dulce andaluz navideño que te permite hacer un viaje en el tiempo al Al-Ándalus, donde la mezcla de culturas nos dejó regalos tan deliciosos como este. Su textura densa y su sabor especiado te llena de espíritu navideño con cada mordisco.
PAN DE CÁDIZ: la obra de arte en mazapán
El pan de Cádiz es, literalmente, un regalo navideño envuelto en mazapán. Este dulce, típico de la provincia gaditana, tiene una presentación espectacular: capas de mazapán, batata y frutas confitadas.
Conclusión: Estos dulces no son solo postres; son tradición, historia y cariño en cada bocado. Prepararlos (o comprarlos en la tienda del barrio) es parte de ese ritual navideño que nos conecta con nuestras raíces. Si nunca has probado alguno de ellos, no esperes más: lánzate a descubrir los sabores que hacen de la Navidad andaluza una experiencia única.
Y recuerda: La dieta puede esperar hasta después de Reyes. ¿Qué sería de estas fiestas sin un buen dulce en la mesa? ¡A disfrutar, que es lo que toca!
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